«Los santos inocentes» -obra narrada en forma de una gran salmodia con una disposición tipográfica de los textos casi poemática- es la novela del sometimiento y la humillación de los perdedores que se erige, al mismo tiempo, en un alegato contra los poderosos y a favor de los desheredados.
Dividida en seis libros, como otros tantos cantos épicos, esta historia trágica y lírica al mismo tiempo nos narra la dramática existencia de unos seres marginados, habitantes de un cortijo extremeño, cuyo sometimiento al amo marca y determina su miserable vida cotidiana.
Las figuras de Paco el Bajo y el «inocente» Azarías, con su «milana bonita», son dos personajes cumbre en la galería delibeana.